Flan de queso con salsa de chocolate caliente
{mosimage}¿A que se ve chulo?. Como se nota que hemos tenido tres días de fiestuki: probar nuevos platos me ha cundido, aunque no tanto como quisiera. Lástima.
Este es un postre facilito y con la ventaja que siempre que puedo busco: que no necesite horno y que se haga de un día para otro. Así que no hay excusa. El plato cuasi rectangular que veis es chino de Londres, lo compré en un mercadillo, no sirve para nada en realidad porque no es muy grande pero mira, para esto si que me ha servido.
Lo primero es hacerse con los ingredientes y con los moldes adecuados. Yo he usado seis como el de abajo, individual, de los de silicona que luego desmoldan muy bien.
Ingredientes:
{mosimage}Para el flan:
– 1/2 kg. de requesón o de queso blanco fresco
– 200 grs. de azúcar
– 2 dl y 1/2 dl. de nata
– 8 grs. de gelatina neutra
– 50 grs. de pasas
– 50 grs. chocolate negro
– 50 grs. de nueces picadas
– ron suficiente
Para la salsa:
– 100 grs. chocolate negro de cobertura y picado
– 200 grs. nata
En un cuenco dejar las pasas cubiertas de ron. En otro, poner las hojas de gelatina en agua fría.
Mientras, ir picando bien picado el chocolate y las nueces.
Se calienta 1 dl. de nata y antes de que hierva se le añade la gelatina bien escurrida. Remover bien.
Batir el queso con unas barillas, añadir el azúcar, las pasas con su ron, las nueces y el chocolate. Mezclar bien.
Montar el resto de la nata y añadir a lo anterior. Mezclar bien.
Y ya está. Sólo queda ir rellenando las flaneras, alisar la superficie con una espátula, cubrir con film transparente y al frigorífico hasta el día siguiente.
Cuando se vaya a servir se hace la salsa de chocolate o bien se hace antes y la reserváis al baño María para que no se enfríe: solo consiste en poner en un cazo la nata y el chocolate troceado, a fuego muy lento, removiendo constantemente con espátula de madera hasta que espese.
Desmoldar las flaneras en un lindo platillo, adornar con algo de color que tengáis a mano, echar un poco chocolate por encima y servir. El resto del chocolate se pone en una jarrita por si alguien quiere más.
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