Recetas Caseras

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Tartas saladas

Quiche de espinacas y uvas pasas

 

Quiche de espinacas con pasas

 

 

Aquí estoy otra vez con uno de mis platos preferidos: las quiches. En cualquier estación del año son muy socorridas, lo mismo sirven para un almuerzo o comida ligeras, que para un aperitivo con los amigos. Y, aunque lo parezca, no dan mucho trabajo. Suelo hacer el relleno y el horneado del hojaldre por anticipado y luego no tengo más que meterla en el horno.
 
Esta receta la he cogido de la revista Cocina Fácil, nº 173. Ni sé el año porque no lo pone y colecciono revistas de cocina como el que no quiere la cosa, y la he tuneado un poco: un huevo de más por aquí, un poco más de queso fresco por allá… Y ha sido un reto el hacerla porque nunca me había encontrado una quiche en la que el principal ingrediente se pusiera crudo. En este caso las espinacas. Aún así me lié la manta a la cabeza y la hice. Ha salido buenísima y es muy ligera. Así que, a falta de otros, me felicito a mí misma. .))).
 
 
 

 

Ingredientes:

1 lámina de hojaldre refrigerado

400 grs. de espinacas (en bolsa, ya limpias y cortadas)

3 huevos

200 grs. leche evaporada

200 grs. queso fresco

50 grs. uvas pasas

Pizca de nuez moscada

Pizca de canela molida

Aceite de oliva, sal, pimienta

 

Preparación:

Precalentar el horno a 200º.

Forrar una fuente de horno con el hojaldre (dejando el papel que lleva y recortándo lo que sobresalga). Presionar bien y doblar los bordes del hojaldre sobre si mismos. Pinchar con un tenedor varias veces. Cubrir con papel aluminio y meter al horno hasta que el hojaldre tenga un poco de color. Reservar.

En una fuente grande poner las espinacas cortadas, el queso fresco en dados y las uvas pasas.

Batir los huevos, añadir la lecha, la canela y la nuez moscada, salpimentar y volver a batir hasta que estén integrados todos los ingredientes. Añadir a la fuente con las espinacas y queso, mezclar bien con las manos bien limpias.

Verter sobre el hojaldre y cocer en el horno a 180º hasta que cuaje.

Servir templada o a temperatura ambiente.

Perfecta con un vaso de gazpacho bien fresquito o una ensalada de tomates.

Admite congelación y está muy buena de un día para otro.

 

 
 
 
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